martes, 11 de febrero de 2014

La casa tradicional gallega

En la casa tradicional gallega, como en toda muestra de arquitectura popular, la forma sigue a la función y los materiales de construcción son aquellos que el medio ofrece de manera natural: piedra y madera.
Estas edificaciones son la herencia de un pueblo integrado en su entorno y muestra de su quehacer. 

Sus muros de piedra aíslan perfectamente tanto del frío como del calor.

La planta de abajo se compone de tres elementos:
- cuadra
- pocilga
- bodega

También podemos encontrar un "sequeiro", lugar de preparación y conservación de las castañas.

El acceso a la vivienda, que está en la planta superior, se hace por una escalera de piedra exterior que acaba en un descansillo o corredor al que van a dar la cocina y los dormitorios.

El hecho de que los animales vivan debajo, ayuda a mantener la vivienda caliente, ya que el calor tiende a subir.

Una parte importante en la vivienda gallega es la "lareira" (espacio de la cocina donde se enciende la lumbre). Con el fuego en el centro y los utensilios de cocina colgados, es el lugar donde se guisa y se pone a secar la carne de la matanza. La "lareira" es además un espacio de encuentro para la familia y los vecinos, tanto por el calor físico, como por su espacio acogedor que invita a la conversación. 

Lareira



martes, 4 de febrero de 2014

El Concello, un ejemplo de democracia

El Concello es una organización democrática popular con más de 800 años de historia.
Cuando el Concello de Bembibre quiere reunirse se tocan las campanas de la Iglesia. Entonces, al menos un vecino de cada casa, acude a la reunión para tratar temas que afectan a todo el pueblo tales como: la organización del riego de los prados; el arreglo de caminos o de edificios comunales como la iglesia, el horno de leña o la escuela; la celebración de la fiesta de San Andrés o de la Virgen de las Nieves etc.
Cada persona tiene voz y voto en las decisiones que se toman. 
En sus orígenes, al Concello solo acudían los hombres de cada casa. En las casas donde faltaba un hombre, podía acudir la mujer y ésta tenía los mismos derechos, contando también su voto. Este aspecto es muy relevante, teniendo en cuenta que el derecho de voto de la mujer llegaría siglos más tarde.
El Concello supone un ejemplo de auténtica democracia, donde las personas tienen la oportunidad de participar en la gestión de su entorno más cercano.